jueves, 1 de febrero de 2018

Potencia eléctrica 


CÁLCULO DE LA POTENCIA DE UNA CARGA ACTIVA (RESISTIVA)
Podemos calcular la potencia que consume la carga activa o resistiva conectada a un circuito eléctrico de la manera más simple multiplicando el valor de la tensión en volt (V) aplicada por el valor de la intensidad (I) de la corriente que lo recorre, expresada en amper.

Utilizando las siguientes fórmulas: 
Fórmula 1

Fórmula 2 

El consumo en watt (W) o kilowatt (kW) de cualquier carga, ya sea ésta una resistencia o un consumidor cualquiera de corriente conectado a un circuito eléctrico, como pudieran ser motores, calentadores, equipos de aire acondicionado, televisores u otro dispositivo similar, en la mayoría de los casos se puede conocer leyéndolo directamente en una placa metálica ubicada, generalmente, en la parte trasera de dichos equipos. En los motores esa placa se halla colocada en uno de sus costados y en el caso de las bombillas de alumbrado el dato viene impreso en el cristal o en su base.





 Quiénes fueron los jesuitas y cuál es su misión con la comunidad?

Como las piezas de un rompecabezas, que sólo cobran sentido cuando se integran en el conjunto. Así son los elementos de nuestra vida. Sueltos, fragmentados, no alcanzan a darnos sentido. Sólo cuando se integran construyen identidad.

Entiendo que es lo que nos quiere decir la Congregación General 35 en el decreto 2: “La identidad del jesuita y la misión del jesuita están enlazadas por la comunidad; efectivamente, identidad, comunidad y misión son una especie de tríptico que arroja luz para entender del mejor modo posible nuestra condición de compañeros”.

Nuestro llamado a cuidar de la casa común no es sólo individual. Es un llamado como cuerpo en la misión que nos une. Es una misión común que afecta nuestro estilo de vida. No podemos sentir ese llamado como cuerpo y participar de la cultura del descarte, de la contaminación, del consumo abusivo de los bienes como el agua. Misión, vida comunitaria, identidad se confunden y entrelazan.



La misión que nace del seguimiento de Jesús nos convierte en amigos en el Señor, y si esto es lo que nos une, el compartir nuestra fe y nuestra misión en el discernimiento y el trabajo en equipo es lo que nos constituye en comunidad y nos construye en nuestra identidad.
Si nuestra misión pasa por la reconciliación de un mundo dividido por la ruptura de la fraternidad, significa que nuestra misión es hacernos comunidad con los que están del otro lado de la frontera, los otros, los diferentes, los migrantes sin documentos, los excluidos de nuestros círculos.
Si lo que nos une es la misión de Dios, no nos pueden separar la raza, la religión, la clase social, la opción política, la nacionalidad, el género o la edad. Nuestra identidad de hijos de Dios es la que nos reúne en la fraternidad de la familia del Dios comunidad y nos involucra en la misión de la misericordia.

2.- Crees que la educación deba  ser un forma de buscar a Dios? 
Cuando se habla de educación en parte sí, porque es una manera  para buscar a Dios.